Entre las reformas radicadas por el Gobierno Nacional se encuentra la dedicada al sistema pensional colombiano y a la necesidad de hacer cambios, ya que durante años han existido factores en el manejo de las pensiones que no permiten a todos los colombianos acceder a una renta básica de jubilación.
Iván Vegas, socio líder de Legal en BDO en Colombia, hace un análisis del documento y el debate que se ha generado alrededor del tema en diferentes sectores empresariales.
¿Qué tan concertada ha sido la reforma pensional en Colombia?
En efecto sí ha sido concertada, pues ha habido mucha discusión del tema desde hace muchos años por los actores relevantes sobre las necesidades del sistema. Por una parte, el sistema de prima media, es decir, Colpensiones, aunque permite pensiones relativamente buenas en término generales, es un sistema regresivo porque está subsidiado al revés, y en lugar de generar más subsidio a las menores pensiones, lo hace para las mayores: es un sistema que logra que el que tiene mejor pensión tiene más beneficio del Estado. Adicionalmente, por el hecho de que algunas personas reciban pensiones tan altas, y por esta composición tan paradójica, pues resulta financieramente ser insostenible para el país en mediano y largo plazo.
Por otro lado, los fondos privados, el sistema de ahorro individual, a pesar de ser financieramente sostenible para los fondos, pareciera que genera unos problemas de carácter social, e incluso político. Esto se debe a que las personas que están en estos regímenes reciben una pensión más baja con relación a los aportes realizados, pues en realidad no existe ningún tipo de subsidio; se trata más bien del ahorro que la persona construyó a lo largo de su vida con los rendimientos proyectados con el tiempo de vida probable para calcular el valor de la pensión, lo cual es muy bajo con relación a los ingresos que la persona venía percibiendo de manera regular, de hecho, se ha establecido que las personas reciben en promedio el 30 o el 35 por ciento frente al ingreso que venía recibiendo antes de la pensión, lo cual es insostenible. Y aunque siempre ha habido muchas discusiones en cuanto a cuál puede ser la solución adecuada, si eliminar uno de los dos sistemas, o establecer mecanismos que coexistan, sin competir.
Lo propuesto, ¿ayuda a aumentar la cobertura con relación al sistema actual?
Uno de los problemas del sistema pensional actual es la cobertura, ya que solo una de cada cuatro personas logra obtener una pensión, es decir, los pensionados en Colombia son muy pocos y hay muchas personas fuera del sistema, y sin ninguna prestación que les garantice una solvencia económica después de su vida laboral. La cobertura es una de las principales necesidades que se establece determinar.
Por ello, la reforma plantea cuatro pilares y especialmente los primeros dos (el solidario y el semicontributivo) pueden ser una alternativa en esta línea. El pilar solidario propone que a todas las personas en estado de vejez y vulnerabilidad se les garantice un ingreso mínimo alrededor de los $233.000 COP y va a estar financiado con un fondo de solidaridad que se recaudará de los salarios más altos y también de los aportes nuevos que tendrán que realizar los actuales pensionados con más de diez salarios mínimos legales vigentes. Y el segundo pilar, permitirá que las personas que entran y salen del sistema, y que cuando lleguen a la edad no cumplan con los requisitos, puedan acceder a unas condiciones especiales para recibir un pago mensual aun cuando no sea en estricto rigor una pensión. Al final dentro del sistema va a haber más personas puedan obtener un ingreso de naturaleza pensional o similar y que antes no lo tenían.
¿En qué punto convergen las reformas pensional, laboral y de la salud en el futuro del trabajo en el país?
El proyecto tiene un punto débil y es que no tiene mucha relación con las otras reformas que se han propuesto por parte del Gobierno Nacional, principalmente con la laboral, ya que uno de los puntos cruciales es que en Colombia en promedio una de cada cuatro personas se pensiona y una de cada tres personas cotiza al sistema, los demás ciudadanos o están por fuera del mercado laboral formal y no están registrados en el sistema o entran y salen y al final de su vida laboral no cumplen los requisitos para obtener una pensión. Esta circunstancia guarda relación directa con la reforma laboral, que en vez de preocuparse por cómo incorporar más personas al mercado laboral formal y esa debería ser la línea coherente entre las reformas. Lamentablemente la reforma laboral no tiene ese enfoque y está orientada a mejorar las condiciones de los trabadores que ya tiene empleo formal con garantías el mercado, olvidando el problema principal en esa materia en el contexto colombiano.
Sectores empresariales se han pronunciado a favor de las medidas tomadas. ¿Qué beneficios tiene el borrador del documento para empresas y personas? ¿Qué retos?
Diversos sectores empresariales han coincidido en que la reforma pensional tiene un enfoque adecuado, teniendo algunos temas discutibles como el valor en el cual debería cotizarse a Colpensiones en término de sostenibilidad del sistema en el pilar contributivo, aun así hay un consenso en que la reforma está bien orientada en cuanto a ampliar la cobertura y disminuir los subsidios de las pensiones altas, lo cual la hace viable políticamente en la medida en que ayuda a trabajar los desbalances del sistema actual, por ello, puede ser más factible que se convierta en ley por la acogida que ha logrado tener.