La tercerización de servicios ha demostrado ser una formula eficiente para que las organizaciones se focalicen en lo que mejor hacen y se generen eficiencias operativas importantes. A su vez, tercerizar servicios implica riesgos reputacionales, de cumplimiento y financieros si no son gestionados adecuadamente. Sin embargo, la certificación de terceros es una herramienta clave en la gestión del riesgo, en la cual de forma objetiva es posible certificar que los procesos realizados por los terceros están soportados en prácticas y controles adecuados. De esta forma se genera un círculo virtuoso que crea confianza entre los proveedores de servicios y los clientes.
En el informe generado por BDO se describen cada uno de estos reportes, su importancia y tendencias en áreas funcionales cuando existe mayor dependencia de la tecnología.
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